Juan Bautista Maldonado dona terreno para la reconstrucción del poblado Ureña

 

El 18 de noviembre de 1867, Juan Bautista Maldonado compró un lote de terreno ubicado en las inmediaciones de la localidad de Ureña, en el estado Táchira. Tras su muerte este inmueble pasó a ser propiedad de sus sucesores, entre quienes se encontraba su hijo Samuel Darío Maldonado:

“[terreno] constante de cuarenta cuadras, cada una de estas de cien varas, situado en el Municipio Ureña, del Distrito Bolívar, al norte de la quebrada nombrada ‘Agua Caliente’… Este inmueble lo adquirió Juan Bautista Maldonado, por documento de fecha 18 de noviembre de 1867; Protocolo 8º de ventas y  (ilegible)   después de su muerte pasó a sus herederos que fueron sus legítimos hijos: Secundina Maldonado de López, Mario Canuto Maldonado, Doctor Samuel Darío Maldonado y Juan Bautista Maldonado…”

[AHFM Nº 159: Documento de partición de bienes, de los hermanos Luis Francisco y María Carlota Castro Maldonado. Oficina Subalterna de Registro del Distrito Bolívar, Documento Nº 94, folios 120 al 124, del Protocolo Primero, de fecha 23 de marzo de 1972]

 

Años después, hacia 1875, Juan Bautista Maldonado donó una parte de este terreno para la reconstrucción del poblado de Ureña, que había sido destruido por un cruento terremoto:

“Ese terremoto de 1875 destruyó completamente el templo y toda la población, sepultando algunas víctimas entre sus ruinas. Un pequeño grupo de vecinos, apegados al sitio, emprendieron la reconstrucción de sus casas pero la mayor parte de los habitantes, encabezados por el Cura Pbro. Br. Carlos Ribera, resolvieron reedificar el pueblo en el cercano sitio del caserío de ‘Los Quemados’, conservando el mismo nombre de Ureña y eclesiásticamente el de San Juan Bautista de Ureña.

“El sitio escogido estaba como a siete cuadras más abajo del primer asiento, cerca de la ribera del río Táchira y frente al caserío colombiano del Escobal. Aquí en Los Quemados se asentó definitivamente la población de Ureña…

“Para llevar a la práctica la refundación del nuevo pueblo, el Sr. Don Juan Bautista Maldonado cedió un buen lote de tierras, como media legua en cuadro, para la construcción del templo, de las calles y de las casas de los vecinos. Se creó una Junta de Fomento, que con las autoridades civiles y eclesiásticas ayudaron a delinear las calles, la gran Plaza principal denominada San Juan Bautista, y fijaron el sitio para la Iglesia…”

[CASTILLO LARA, Lucas Guillermo, San Juan Bautista de Ureña y Santa Bárbara de La Mulata, (Biblioteca de autores y temas tachirenses Nº 143), Caracas, Escuela Técnica Popular Don Bosco, 1997, pp.80-81]

Iglesia San Juan Bautista en Ureña.
Foto: Natalia Díaz, 2017