En el libro de registro de bautizo de la parroquia de Nuestra Señora de Altagracia en Caracas, se describe la fecha de nacimiento y bautizo de Iván Darío Maldonado:
“En diez de julio de mil novecientos veinte y seis, yo el infrascrito, Cura párroco de Nuestra Señora de Altagracia de Caracas, certifico: que en Abril de mil novecientos catorce, el Pbro Dr. Rafael Peñalver, cura entonces de esta parroquia bautizó solenmemente, conforme al ritual Romano a un párvulo que nació el veinte y ocho de Enero de mil novecientos trece, a quien puso por nombre Iván Darío, hijo legítimo del Dr. Samuel Darío Maldonado y Dolores Bello Torres. Fueron sus padrinos: Ricardo Bello y Luz Torres de Bello, a quienes advirtiò el parentesco y obligaciones”.
En la misma página y seguidamente se encuentra el registro del bautizo del indígena Fernando Yaracuyano, procedente de Río Negro, Amazonas y quien vivió durante varios años en la casa de Samuel y Lola, quienes fueron sus padrinos.
“En diez de julio de mil novecientos veinte y seis, yo el infrascrito, Cura párroco de Nuestra Señora de Altagracia de Caracas, certifico: que en Abril de mil novecientos catorce, el Pbro Dr. Rafael Peñalver, cura entonces de esta parroquia bautizó solenmemente, conforme al ritual Romano a un párvulo que nació el año de mil novecientos dos, indio de Río Negro, a quien puso por nombre Fernando Yaracuyano,, hijo de padres deconocidos. Fueron sus padrinos: el Dr. Samuel Darío Maldonado y Dolores Bello Torres de Maldonadoa quienes advirtiò el parentesco y obligaciones”.
[Libro de Registro XXX de bautismo, notaría de la Curia, Parroquia Nuestra Señora de Altagracia-Caracas, página 83, 8 de julio de 1926]
“Cuando tenía 7 u 8 años, me llevaron a conocer a mi abuela Lola, quien vivía en La Pastora, en una casa muy bonita. Ella era muy cariñosa conmigo y cada vez que la visitaba, me daba un regalito. Allí había un señor que se llamaba Fernando Yaracuyano, un indio del Amazonas y que mi abuelo Samuel Darío, – como era antropólogo, visitaba el Amazonas – se lo trajo y lo criaron junto con mi papá. Después que Fernando crece, era quien me llevaba a visitar a mi abuela y a mi papá – ya no era mi mamá -. Yaracuyano vivía en La Planicie, que era un barrio de Caracas donde vívia gente humilde. Su casa era en un rancho que lo tenía todo: animales en el patio; gallinas, pollos, conejos y muchas plantas. A mí me encantaba ir para allá dónde se veía el sur de Caracas. Muchas veces me quedé fines de semana en su casa. Como mi papá tenía conexiones con el gobierno, le consiguió un trabajo de vigilante en el Banco Central de Venezuela, Yo conocí Caracas muy bien porque me montaba en el autobús de Circunvalación con Fernando, el cual le daba la vuelta a toda la ciudad. Fernando era quien me sacaba a pasear y bueno, él fue de las personas a las que en mi infancia, le tenía gran cariño”
[Entrevista realizada por Natalia Díaz a Marcos Maldonado. Marzo de 2017. Archivo Histórico familia Maldonado)]